
Cada uno por supuesto es libre de practicar y llegado el caso competir en el deporte que le guste y le apetezca, la oferta es amplia y muy variada. Los deportes evolucionan y el triatlón no podía ser menos: más participantes, más federados, más pruebas y mejor calidad, mayor nivel deportivo... Con todo esto también ha crecido de forma inexorable alrededor de él una gran oportunidad de negocio y a pesar de la gran oferta (que debería implicar menor precio) se ha convertido casi en un deporte elitista donde los menos pudientes (desempleados y estudiantes fundamentalmente) tienen pocas oportunidades para poder competir.
El otro día leía en la web de Triluarca su experiencia personal, parecida a la de algunos que empezamos en esto hace más de 20 años pero creo que no es extrapolable a la situación actual en algunos lugares de España; ahora mismo no es fácil competir para muchas personas, ni siquiera en las pruebas cercanas a su localidad. La inversión inicial para comenzar es ya de por si alta aunque no se busquen grandes cosas (bicicleta, neopreno, casco, zapatillas y ropa, lo mínimo y aún de segunda mano suponen una inversión). Si ya es un iniciado, por ejemplo en Cádiz competir en triatlón, en estos casos que hablamos, no es tan sencillo sin echar mano del bolsillo de los padres u otro tipo de alianzas (ir por la patilla, por ejemplo con algún amigo o embaucar a algún sponsor con nuestros resultados excelentísimos o nuestro potencial futuro). Licencia 60e, cuota de club mensual (5-10e en el mejor de los casos), inscripciones a pruebas atractivas y cercanas (titán, Ican, Sierra Nevada por ejemplo) con cuotas de inscripción por encima de los 100e y otras pruebas no tan atractivas siempre por encima de los 20e a lo que hay que sumar, en nuestro caso, siempre desplazamientos mínimos de 200 km (la gran mayoría de pruebas están en Málaga, Sevilla y Córdoba) con los consiguientes gastos, de alojamiento nos olvidamos (toca madrugar todo lo que se pueda) y para ahorrar se puede uno llevar la tortilla de casa o el bocata de chorizo, pero no es esto lo ideal si lo que se quiere es hacerlo bien y sobretodo promocionar nuestro deporte entre los jóvenes y que surjan nuevos valores. Soñar para muchos con estar en un Campeonato de España (en Soria, en Ibiza o en Vitoria por citar lo que nos llega) tampoco será barato ni fácil. Creo que no es el camino. Los triatletas de paso no son minoría, cada vez habrá más entre los que no pueden estar, cambiando de deporte por necesidad más que por apetencia.